El aire que respiras mientras trabajas puede perjudicar tu salud y reducir tu productividad.
Hoy en día, pocas empresas dudan de la necesidad de asegurar el bienestar de los empleados, la protección del medioambiente y la seguridad en el lugar de trabajo. Y en esta tarea, una estrategia de EHS industrial, donde la gestión de la calidad del aire es vital, desempeña un papel esencial.
Así que en este artículo te proponemos descubrir las soluciones de Kunak y su potencial para mejorar el bienestar laboral.
¿Por qué hay que monitorizar la calidad del aire en el trabajo?
Disfrutar de un aire limpio en el trabajo va más allá del confort térmico. Al fin y al cabo, las temperaturas altas también inciden sobre el bienestar humano. Y, sí, también es una variable que se puede medir con nuestras soluciones.
Las personas también están expuestas a contaminantes que pueden perjudicar su salud durante la jornada laboral.
- Partículas en suspensión (PM10, PM4, PM2.5 y PM1), presentes en ambientes polvorientos, con humo, aerosoles, etc.
- Gases (CO, NO2, O3, SO2, H2S, NH3, etc.), procedentes de la quema incompleta de combustibles o de otros procesos industriales.
- Compuestos orgánicos volátiles (COVs), habitual en trabajos donde se emplean disolventes orgánicos (siderurgia, pinturas y barnices, cosmética, etc.)
- Dióxido de carbono (CO2), que sin ser un gas nocivo para la salud humana, constituye un indicador del grado de ventilación de un local.
Por otra parte, dependiendo de los países y la actividad laboral, la monitorización del aire en entornos laborales es obligatoria.
Medición de los niveles de contaminación en el contexto de una estrategia de EHS industrial
Las estrategias de medioambiente, salud y seguridad (EHS en inglés) establecen un marco de gestión para que las empresas preserven
- la salubridad del lugar de trabajo;
- el bienestar del personal laboral, y
- las condiciones naturales del entorno.
En el caso concreto de la salud de las personas trabajadoras, la identificación, evaluación y control de los riesgos recae en
- la seguridad industrial, disciplina dirigida especialmente a reducir el riesgo de sufrir un accidente laboral, y
- la higiene industrial, que es la especialidad que más interés podría mostrar por una monitorización del aire en tiempo real. Al fin y al cabo, su principal objetivo es prevenir la aparición de enfermedades profesionales, una de las posibles consecuencias de la exposición continuada a niveles de contaminación perjudiciales.
Cómo evaluar la calidad del aire en un entorno laboral
Medir la calidad del aire permite identificar y evaluar los contaminantes presentes en un lugar de trabajo y tomar las medidas más oportunas para su control (ventilación, EPIS, etc.)
Una de las formas más eficientes de llevar a cabo esta tarea es confiando en las soluciones de Kunak. Nuestros sistemas están reconocidos en el ámbito internacional y destacan por su precisión y fiabilidad.
La implementación de una red de monitorización en tiempo real con cualquiera de nuestras estaciones (Kunak AIR Pro y Kunak AIR Lite, además de las sondas externas que se estimen necesarias) posibilita:
- Controlar y alertar de la presencia de niveles de contaminación perjudiciales por partículas en suspensión, gases u otros agentes nocivos, labor que facilita nuestro software Kunak AIR Cloud.
- Evaluar la exposición de las personas trabajadoras en su entorno inmediato.
- Mejorar la eficacia de las medidas de control, analizando de forma continua si las decisiones adoptadas para proteger la salud del personal de la organización son suficientes o se requieren disposiciones adicionales.
Beneficios de implementar un sistema de gestión de EHS industrial con un foco especial en la calidad del aire
Una gestión de EHS industrial se centra en la gestión proactiva, buscando reducir los riesgos medioambientales, sanitarios y de seguridad en el lugar de trabajo. Y el control de la calidad del aire es parte integrante de esta estrategia.
Pero, ¿qué beneficios obtienen las empresas que apuestan por este marco? Algunos de los más claros son:
- Personas trabajadoras más sanas. La reducción de los riesgos se traduce en menos días de baja por enfermedad y mayor productividad.
- Ahorro de costes. La prevención de los problemas relacionados con la calidad del aire contribuye a reducir los costes médicos y de indemnización.
- Mejora de la reputación. Demostrar un compromiso firme con el bienestar de los empleados y la responsabilidad medioambiental mejora la imagen pública de la empresa.
Estos beneficios se evidencian a través de diversos estudios. Estos demuestran que la mejora en las variables ambientales incide sobre el rendimiento y aumenta la productividad. Así, un análisis efectuado en personas que trabajan en edificios acogidos a los más altos estándares de certificación reveló que:
- El 26,4 % obtenían puntuaciones más altas en pruebas cognitivas.
- El 6,4 % mostraba una mejora calidad del sueño.
- El 30 % presentaba menos síntomas asociados al “síndrome del edificio enfermo”.
En resumen
Controlar la calidad del aire en los lugares de trabajo es fundamental para reducir los riesgos laborales. No se trata únicamente de un requisito legal. También es una manera de mostrar el compromiso empresarial con el bienestar de las personas trabajadoras, una actitud que se traduce en una mejor imagen pública.
El mejor momento de actuar es ahora.
